Museo Valltorta

Museo Valltorta

 

Complejo rural Castellón ValltortaComplejo rural Castellón Valltorta

 

El barranco de la Valltorta en Tirig, una visita al pasado más ancestral.

En la comarca del Baix Maestrat se puede viajar en el tiempo. No solo contamos con una abundante historia reciente, que se puede ver reflejada en el patrimonio histórico de Sant Mateu, sino que muy, muy cerca, se encuentra uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de toda la provincia de Castellón.

El Barranco de Valltorta ha sido durante muchos siglos como lugar de refugio para varias civilizaciones. De esos primeros habitantes que poblaron la comarca quedan abundantes restos y las pinturas rupestres que se encuentran en los refugios de este especial enclave.

Para llegar hasta ellos hay que desplazarse desde Sant Mateu a Tirig, localidad vecina en la que se levanta el Museo de la Valltorta, que es la puerta de entrada al parque arqueológico. En el Barranco de la Valltorta se pueden admirar pinturas rupestres que cuentan con miles de años de antigüedad y que son testigos de la presencia de vida humana a lo largo de mucho tiempo en la zona.

El Museo de la Valltorta está en el Pla de l’Om y además de las instalaciones destinadas al estudio de la zona, hay cuatro salas con una exposición temporal que recoge la evolución de los primeros homínidos en la zona. Además, también se puede ver cómo era la fauna hace miles de años e incluso hay una reproducción a tamaño real del principal refugio de la Valltorta, con la figura del Arquero de Valltorta.

Esta es la imagen más representativa de la muestra, tanto en el museo como en el propio Barranco de la Valltorta y ha sido elegida como representación de la provincia de Castellón. Pero no solo se tiene esta reproducción, sino que también se puede ver cómo vivían nuestros ancestros en estos refugios, con una recreación de uno de los refugios en la esa época tan lejana.
Después de la visita al Museo de la Valltorta se puede visitar el propio Barranco de la Valltorta, donde se pueden apreciar muchas más figuras y se conoce más sobre la vida en la naturaleza y cómo se comportaban con su entorno los habitantes de la zona.

Tras esta emocionante visita, no hay nada como volver al complejo rural Turismaestrat y disfrutar de una buena cena hecha en la barbacoa del complejo, disfrutar de un relajante baño y dejarse llevar por el increíble ambiente que se disfruta en Sant Mateu.